La Tos en los niños

Se acercan los meses fríos y nos encontramos que cada dos por tres el pequeño tiene tos. Había estado bien durante el verano y ahora con el inicio del cole, los mocos y las toses es el día a día.

¿Por qué tosemos?

La tos es un reflejo producido por la irritación o inflamación de la vía aérea, desde la nariz a los pulmones, y tiene la función de expulsar del sistema respiratorio los gérmenes o cuerpos extraños que hayan entrado en él o las secreciones que se produzcan en su interior. “La tos es muy importante para que la garganta, los bronquios y los pulmones se limpien bien de los «huéspedes” que no deberían tener”. Es, por lo tanto, un reflejo de protección común a muchas enfermedades.

 

La TOS puede tener diferentes orígenes acompañarse de distintos síntomas «sonar» de forma diferente

 

Clasificación de la Tos

 

  1. Tos Seca

Se llama así a la tos que no mueve secreciones y que puede resultar particularmente molesta y poco eficaz. Su origen es la inflamación de las vías respiratorias, clásica tos de inicio de los resfriados.

Cuando es persistente puede ser un síntoma de asma, y va acompañada de fatiga y ruidos, como pitos, al respirar.

También suele ser tos seca la tos nerviosa, que no se debe a una enfermedad respiratoria, sino que es un acto autoprovocado, de forma más o menos consciente, y que característicamente mejora por la noche.

  1. Tos Ronca o «Perruna»

Es un tipo de tos seca característico de la laringitis, que es un tipo de resfriado que afecta a la parte baja de la garganta, donde están las cuerdas vocales. Suele acompañarse de ronquera o afonía y, a veces, de otro ruido áspero característico al coger aire, y que significa que está estrechado el paso de aire.

Puede llegar a dificultar la respiración del niño, por lo que ante esta situación hay que acudir al médico para establecer un tratamiento.

  1. Tos Blanda

Es la que sirve para evacuar las secreciones (flemas), que habitualmente son luego tragadas por el niño. A partir de ahí siguen las flemas dos posibles rutas: o se vomitan o se digieren. La tos blanda de corta duración (hasta 3 semanas), que no se asocia de dificultad para respirar, es la que habitualmente se ve en los catarros normales de los niños pequeños y puede considerarse una tos buena, pues ayuda a la curación.

En esta situación, recomendamos fundamentalmente agua, cuanta más agua beba el niño, menos espeso es el moco y así facilita la expulsión de este.

  1. Ataques de Tos

Un ataque de tos en un niño pequeño, que previamente se encontraba bien y que no estaba siendo vigilado, puede ser un síntoma de la aspiración de algún cuerpo extraño, como un trozo de un juguete, alguna pieza pequeña o un fruto seco (hay que evitarlos en los menores de 5 años).

  • Si un niño se atraganta con comida o uno de esos objetos, lo que hay que hacer es animarle a toser (que es lo más efectivo) y solicitar ayuda médica lo antes posible.

Otra enfermedad que típicamente produce ataques de tos es la tos ferina, que puede ser grave en los más pequeños, y que produce ataques intensos de tos en ocasiones durante meses. Característicamente se produce como un gallo inspiratorio entre las tandas de tos continua, que no dejan coger aire.

  1. Tos Crónica

Hay niños que tienen tos de continuo, una situación que preocupa mucho a los padres. Sin embargo, hay que decir que es habitual que los niños pequeños que acuden a la guardería padezcan con frecuencia hasta 5–6 episodios de catarros al año. La tos que producen puede durar hasta tres o incluso cuatro semanas, aunque lo más habitual es que cesen en una o dos semanas.

  • En caso de que la tos persista más allá de cuatro semanas, se debe acudir al pediatra para que valore el caso y busque si existe alguna patología que causa esa tos mantenida

¿Hay que tratar la tos?

Depende de la situación en la que nos encontremos:

  • Si la tos es una respuesta defensiva del organismo, no parece justificado tomar medicinas para eliminarla, ya que nos va a ayudar a eliminar los gérmenes y/o secreciones de las vías aéreas.
  • En determinados casos, como en el asma, el tratamiento de la causa (medicación contra la inflamación bronquial) hace disminuir la tos.
  • En niños mayores de un año, la miel puede resultar beneficiosa en el caso de la tos seca del inicio de los catarros.
  • La humedad (vahos) resulta controvertida como tratamiento, pues en unos casos beneficia y en otros puede perjudicar.

¿Cuándo se debe consultar al pediatra por tos?

  • Dificultad para respirar o la respiración es muy rápida
  • Coloración de la piel con amoratamiento o color azulado de los labios
  • Fiebre alta
  • Ruidos respiratorios
  • Tos persistente
  • Aspiración de un cuerpo extraño
  • Dificultad para la ingesta de líquidos y alimentos

 

Cada tipo de tos puede ir asociado a uno o varios síntomas, por lo que se debe tratar de manera diferente. No se puede generalizar los tratamientos. Estos deben ser personalizados por su médico o pediatra. Y siempre ante cualquier duda, consultar con su farmacéutico.

María Isabel Navas Romero

Farmacéutica en Argamasilla de Alba